Este óleo sobre lienzo de 144 x 106 procede de una colección particular de gran interés iconográfico, donde aparece, con dalmática diaconal y con los instrumentos de su martirio, el santo patrón de Valencia. Destaca el genial trabajo del rostro y las manos, así como los adornos del traje del santo. Los instrumentos de su pasión, la rueda de molino y la cruz en aspa, así como sus otros atributos (libro y palma de mártir) aparecen perfectamente patentes. Se trata de un anónimo de escuela barroca valenciana fuertemente influida por la Italia española (Ribera) y los focos pictóricos locales (Ribalta).